lunes, julio 30, 2007

Potus


Escuchaba una publicidad radial de Pago Fácil, de esas sonzas y supuestamente cómicas, donde hablaban de un potus. ¿El potus es una planta para la comedia? Lo pienso porque se recurre a ella en muchas ocasiones para producir un efecto gracioso en cualquier sketch. Puede ser una mujer que vive sola que habla de su potus, o un soltero que, a falta de otra actividad, se dedica a regarlo. Pero la planta por sí misma no creo que pueda hacer un buen espectáculo de stand-up; no hace reír su sola presencia: es un vegetal, después de todo.
Si es una palabra con potencia y cálida, gorda y envolvente. Pronunciarla es placentero. Una razón por la cual a algunos les puede producir gracia es por su parecido con la palabra "puto". Pero en los pasos de comedia siempre va a acompañada del genitivo "mi". Siempre es algo propio, y pareciera remitir a una cuestión escatológico-sexual, como si fuera la vagina, el ano, el pene o los testículos. La publcidad que mencioné al principio es sobre el tiempo que cada uno tiene en su vida, y habla un tipo diciendo que hace carrera de potus: el que crece más rápido gana. El potus es algo de solitarios, pero también de perdedores. Es alguien que no tiene nada en la vida. Pero ¿por qué elegir el potus y no una begonia, por ejemplo? Ese es el misterio. Presumo que tiene que ver con algo cercano a la masturbación, a la intimidad más profunda. Como ya sugerí, la palabra es sensual y adormecedora en su pronunciación, y tiene intención sexual en su cita en el ambiente cómico, lo cual la hace especial como planta de compañía. El potus es pachorriento y paciente; aguanta lo que se le ocurra a su dueño. Es todo cuestión de palabra, porque el aspecto del potus no mueve a nada en especial.

1 comentario:

Zoid dijo...

Permitime disentir.

Me parece que la mención al potus es más sencilla de lo que planteás.

El potus es más popular que la begonia. ¿Por qué? Primero, porque el potus, al ser de interior, es más apto para la vida en la ciudad. Segundo, porque las begonias son horribles. Y tercero, porque yo lo digo.

Además, la imagen de un potus colgando suele ser más graciosa que la imagen de una begonia. O sea, eso de tener en tu casa una maceta agarrada de unas cadenas de plástico agarradas de un gancho de plástico clavado a la pared, que encima tiene una planta gigante colgando, es de por sí bastante extraño.

Siguiendo con la imagen del potus, también ocurre que da la sensación de que se trata de lo más insulso en el universo. Un cacho de hojas colgando, que si bien si están cuidadas pueden tener un lindo color verde... no dicen nada.

Además de la familiaridad del potus. Voy a casos empíricos: no recuerdo haber visto en casa de nadie una begonia, pero si hay plantas, siempre hay un potus.

No sé, me parece que hacer un paralelismo con alusiones estatológico-sexuales es hilar muy fino.